A mi musa
A mi Musa he requerido
pues mi corazón reclama,
ella que encendió la llama
a que continúe a mi lado.

he tenido que rogarle,
y hasta puede...suplicarle
ya que su ausencia es mi pena.
Parece que ha consentido
y desde aquí yo le ruego,
que comprenda de mi apego
sin ignorar que he sufrido.
¿Para que el martirizarnos
con ese silencio absurdo,
incomprensible y tan burdo
que nos obliga a buscarnos?
Seamos más congruentes
y recuperemos el trato,
pues es un bello contrato
que nutrirá nuestras fuentes.
Brotarán nuestros poemas
como alegres mariposas,
que sobre campos de rosas
revolotearán sin problemas.
B.G.C. 30/01/ 2014 ( 172 )