Del amor en su grandeza,
es que sin aparente razón
uno pierde la cabeza,
cuando cree que hay traición.
No se para uno a pensar
y se carga de razones,
empeñándose en demostrar
en que los pares...son nones.
Podemos tener delante
Al mismísimo San gabriel,
que impondremos el talante,
afirmando, la culpa es de el.
El amor noble y transparente,
sucumbe ante le duda,
la verdad queda silente
y se impone la furia ruda.
Pero no obstante cantemos,
pues el buen amor lo merece
y mientras tanto disfrutemos,
del "milagro" que acontece.
Gracias amor fue sublime,
ternura, pasión, galanura,
respeto y verdad que redime
del aguijón de la duda.
B.G.C.
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